ÚLTIMA EXPERIENCIA

LA HORA DE LA BUENA SUERTE

No nos dejemos engañar, Última Experiencia no son unos recién llegados. Llevan ya una década puliendo su propio estilo a base de batirse el cobre, de forma admirable, en todos los escenarios habidos y por haber. Estilo basado en los grandes clásicos de esto llamado rock ‘n’roll que algunos se empeñan en complicar y que a este trío madrileño le sale tan fácil y natural, y tal vez eso sea lo verdaderamente complicado. Recién salido del horno su primer, “La Casa de la Bruja”, tras un largo y meditado proceso de maduración, tenemos la oportunidad de disfrutar de ellos este próximo viernes 27 en la Sala Black Note de Valencia.

¿Cómo y cuando se forma ‘Ultima Experiencia?

El grupo se formó de forma casual hace muchos años, cuando empezaba yo en la facultad. Nos juntamos tres colegas para hacer versiones de nuestros grupos favoritos, aunque yo ya venía de otros grupos en los que ya había empezado a componer. Poco a poco fui metiendo las canciones propias, y aquello ya dio lugar a Última Experiencia. Empezamos llamándonos “The Last Experience”, por homenajear a Hendrix, en el cual basábamos nuestro repertorio casi entero, y cuando vimos que teníamos ya material suficiente lo castellanizamos, y nos llamamos Última Experiencia desde entonces.

En diez años de existencia, contáis con dos EPS (Madrid, 2009 y Tres, 2010), que han abierto paso a este primer larga duración. ¿Ha valido la pena tan larga espera?

Sobre todo hemos sido chicos buenos, y hemos visto lo que nos demandaba la gente. Nos habíamos marcado unos pasos y una serie de escalones que sabíamos que teníamos que subir, y para subir esos escalones no necesitábamos un disco, porque la gente realmente ya no consume los discos. Lo que consumen son canciones, o se acercan a los grupos por los videos musicales, por Youtube o cosas así, se acercan en pildoritas, de canción a canción. Nos dimos cuenta que era muy incongruente ofrecer un largo para darnos a conocer así de primeras a nivel nacional. Es ahora, después de los dos EPS cuando nos hemos dado cuento de que la gente nos pide mucho más material. Nosotros hace años que tenemos material ya no para grabar un disco sino para grabar tres, y hemos esperado al momento en que la gente pensase que los EPs estaban bien, pero se quedaban cortos, y no sonaban tan bien como sonamos ahora en directo.

¿De dónde surge el título “La Casa de la Bruja”?

Es un paralelismo que hicimos en una canción con la casa de la bruja de Hansel y Gretel. Para nosotros no tiene un sentido literal como en el cuento, sino que simboliza un estado emocional, una especie de prisión preciosa en que nos hemos visto inmersos últimamente, y como vimos que el nombre funcionaba para ponérselo al primer disco, decidimos optar por esa canción. Además estamos muy orgullosos de ella, creemos que es una de las mejores del disco.

Se aprecia a primera escucha que vuestras raíces están en el hard rock y blues rock de los años 60 y 70. Sin embargo, al escuchar el grupo no te sale la frase suena a tal o cual banda clásica, sino que hay un sonido muy propio que lo distingue del resto de bandas actuales de este país. ¿Era ese el gran reto a conseguir?

Pues sí, lo que hemos intentado hacer en el disco es que todos los estilos que nos gustaban sonasen a nosotros, no nosotros sonar a esos estilos. Si hacemos una canción hard rock, no queremos sonar como Black Sabath, si hacemos una canción country, no queremos sonar como Johny Cash, o si hacemos una canción pop no queremos sonar como los Byrds. Queríamos que todos esos estilos tuvieran un sonido común que fuera “Ültima Experiencia”

En los agradecimientos del disco hay una frase tuya que me ha encantado, que es “a la mala suerte, porque de no ser por ella no tendría suerte ninguna”. Aunque no lo parezca a simple vista, esta frase me parece fruto de un optimista irredimible…

(Risas) Yo soy pesimista por naturaleza, creo que es por genética, porque en mi familia hemos salido todos muy pesimistas. Aún así, tengo que reconocer que esa frase no es mía, es una frase de un blues mítico de Albert King, en el que dice “If it wasn´t for bad luck, I wouldn´t have no luck at all”, de la que mi frase es la traducción. La rescate porqué una de las canciones del disco habla de esa mala suerte, “La espiral”, que es una de las canciones más rockeras del disco, y que habla de meterse en una espiral de mala suerte, y como una mala decisión te lleva a un tropezón inesperado, como ese tropezón te lleva a una situación aún peor. Así que como en los agradecimientos hice también un guiño a las canciones, pues me apropié de esa frase de Albert King.

Hablando de blues, una de las canciones, “Lo sentido” es uno de los blues más deliciosos que he escuchado en castellano desde hace mucho tiempo, tanto por música como por letra, como una manera de acercarse al desamor desde la fantasía, ¿no?

Sí, aún ahondando en el pesimismo del que habla, se trata de dejarse llevar un poco por la ficción, de dejarse llevar por la magia aunque sepamos que luego sea mentira. Se trata de adentrase en ese terreno un poco pantanoso, aunque desde el punto de vista de la ficción.

Otras de las canciones, “Janet The Planet” tiene precisamente el mismo nombre de vuestra empresa de promociones y management. ¿Qué fue primero, el huevo o la gallina, la canción o la empresa?

Fue un mote que le puse a la chica que se encarga de la promo, aunque en realidad viene de otra historia (risas). Viendo un documental sobre un concierto de Frank Zappa estábamos flipando porqué Zappa y su banda eran algo muy marciano, pero es que el público era ya algo increíble. Hay un momento en que subió a una chica al escenario y le preguntó cómo se llamaba, y ella en lugar de decir “Hello, I’m Mary”, o alguna cosa así, va y dice, con voz seductora, “I am Janet The Planet”, y nos encantó. Así que a partir de entonces se lo empecé a llamar a esta chica, y como le debía una canción desde hace mucho tiempo, y es más fácil hablarle a un personaje que a una persona real, decidí llamar la canción así, va sobre ella.

Hablemos ahora de una iniciativa en la que vosotros fuisteis pioneros, como es la de “Instant Live” ¿en qué consiste?

Lo hemos hecho en tres ocasiones, porque la infraestructura es bastante costosa, pero el resultado deja a la gente con la boca abierta. Consiste en grabar el concierto a la vez que está ocurriendo: nosotros estamos tocando, con un set de unas veinte canciones, se graba hasta la diecisiete, y durante esas tres últimas canciones en que nosotros estamos rematando el concierto se hacen las copias del mismo directo. Cuando la gente sale ya tiene en el puesto de merchandising el concierto al que acaba de asistir, que repartimos gratis, y por el precio de la entrada tenías el concierto y luego el mismo concierto que se llevaban a casa, con lo que se quedaban alucinados.

En “Carnaval” se hacen referencia a mitos de la literatura y de la cultura popular, como Marilyn, Cenicienta, o los tres mosqueteros, pero sobre todo lanza un dardo afilado a la gente que pretende ser lo que no es en el mundo de la noche. ¿Abunda este tipo de personajes en los ambientes del rock madrileño?

Creo que más bien abundan en cada bar o zona de ocio de España. Supongo que a todo el mundo le ha pasado que conoces a una chica que te da primero una impresión, pero que cuando conoces un poco mejor es como si se quitará el maquillaje y fuera todo lo contrario. Realmente creo que nos ponemos todos como armaduras, máscaras, el rol que queremos llevar por la vida, pero a la que nos dan un poco de confianza y de cariño, nos abrimos un poco y sacamos nuestra verdadera naturaleza. De ahí viene lo de “Carnaval”.

Atacamos ahora con la pregunta Wyoming. ¿Cómo entra en contacto con vosotros y surge el rollo de los Insolventes?

Nos vio en directo por casualidad en el Honky Tonk, en Madrid. Acabamos de tocar y alguien nos dijo, “venid, que os voy a presentar a alguien al que le habéis gustado mucho”, fuimos y era Wyoming. Empezamos a hablar, y hubo mucho feeling respecto a la personalidad. Nos gustaba la misma música y teníamos la misma visión sobre lo que había que hacer encima de un escenario, y después de unas cuantas cervezas pasó lo que suele pasar en estos casos: “¡no tienes bemoles a subirte al escenario con nosotros!” “¿Qué no? ¡Yo canto la que tú quieras!”. Y esa conversación borrachuza derivó en que al siguiente concierto que teníamos nosotros en el Honky Tonk se subió al escenario y canto “Like A Rolling Stone”, “Wild thing”, y no me acuerdo cual más, y aqullo se puso patas arriba, fue increíble. Cuando acabamos dijo el que aquello había que aprovecharlo, que podríamos hacer una banda de versiones, y le dijimos que por nosotros encantados. Llevamos ya casi cuatro años, ya hemos dado conciertos por casi toda España, y nos va de maravilla.

Este próximo viernes 27 de Enero estrenáis el disco en la sala Black Note de Valencia, antes incluso que en Madrid…

Coincidirá que es fin de gira de presentación del EP “Tres”, y ensayo general de la gira de este año de presentación de “La Casa de la Bruja”, así que efectivamente será primicia nacional allí en el Black Note.

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Mariano López Torregrosa